Cuando llegas a Córdoba y el calor empieza a apretar, no hay nada como sentarte en una terraza y pedir un buen salmorejo cordobés. Cremoso, intenso, con ese punto de ajo y coronado con jamón serrano y huevo duro.
¿Se te hace la boca agua? Pues prepárate, porque en este artículo vamos a sumergirnos en la historia, la receta auténtica… Hasta los mejores sitios para probar esta delicia andaluza.
Y si vienes desde fuera, te recomendamos una opción ideal para descubrir la gastronomía cordobesa a tu ritmo: puedes alquilar un coche sin franquicia en el aeropuerto de Málaga. Así podrás moverte cómodamente entre tabernas, monumentos y barrios históricos con libertad total.
Contenido de la página
Historia del salmorejo cordobés
¿Sabías que el salmorejo tiene más historia de la que parece? Detrás de ese cuenco de pan y tomate se esconde una receta con siglos de tradición que ha pasado de generación en generación, adaptándose, reinventándose y conquistando paladares más allá de Andalucía.
A continuación, vas a descubrir cómo nació este plato, por qué es tan especial en Córdoba y qué curiosidades debes conocer para saborearlo con más gusto. Desde su origen humilde hasta su reconocimiento como icono gastronómico nacional, el salmorejo es mucho más que una sopa fría.
Origen del salmorejo cordobés
Aunque su aspecto puede recordar a una sopa fría moderna, lo cierto es que el salmorejo cordobés tiene raíces muy antiguas y un pasado mucho más humilde de lo que podría parecer.
Este plato surgió como una forma inteligente de aprovechar el pan duro que sobraba en las casas, mezclándolo con ingredientes básicos de la despensa andaluza: ajo, vinagre, aceite de oliva y sal.
En su forma primitiva, se trataba de una especie de majado espeso, parecido al ajo blanco o al gazpacho sin tomate. De hecho, el tomate (ese ingrediente clave en el salmorejo actual) no se incorporó hasta bien entrado el siglo XVIII, cuando su uso comenzó a extenderse por la cocina popular tras su llegada desde América.
Fue entonces cuando el salmorejo adquirió ese color rojizo característico y se convirtió en lo que hoy reconocemos como uno de los grandes clásicos de la gastronomía cordobesa.
Existen escritos de viajeros del siglo XIX que ya mencionan este plato como habitual en las casas cordobesas, especialmente en las épocas de más calor, debido a su frescura, sencillez y capacidad para saciar el apetito.
Una teoría etimológica apunta a que la palabra “salmorejo” podría derivar de “salmuera”, en referencia a aquellas mezclas tradicionales de ajo y vinagre utilizadas desde la Edad Media para conservar alimentos y aderezar platos fríos.
Hoy, el salmorejo ha cruzado fronteras y ha llegado a los menús de restaurantes de toda España e incluso del extranjero.
Pero solo en Córdoba podrás probarlo con la textura y el sabor auténtico, elaborado con pan de telera, ajo de Montalbán y aceite de oliva virgen de la campiña. Una receta sencilla, sí, pero que encierra siglos de historia en cada cucharada.
Calleja del salmorejo cordobés
Sí, como lo lees. Córdoba le ha dedicado una calle al salmorejo. Se trata de la Calleja del Salmorejo Cordobés, una pequeña vía peatonal situada en la Judería, cerca de la Puerta de Almodóvar.
Lo más especial de esta calle es que en sus paredes puedes encontrar un azulejo con la receta original del salmorejo. Un homenaje que mezcla arte, gastronomía y cultura popular. Es un lugar perfecto para una parada, sacarse una foto y compartir en redes ese momentazo gastronómico.
Además, está muy cerca del Alcázar de los Reyes Cristianos, así que puedes incluirla fácilmente en tu ruta turística por el casco histórico.
Cofradía del salmorejo cordobés
En Córdoba no se toman el salmorejo a la ligera. Tanto es así que existe una cofradía gastronómica dedicada exclusivamente a esta receta: la Cofradía del Salmorejo Cordobés.
Esta entidad trabaja para proteger la receta tradicional, difundir su historia y garantizar la calidad de lo que se sirve como “salmorejo cordobés auténtico” tanto dentro como fuera de la ciudad.
Organizan concursos, jornadas de degustación, colaboraciones con escuelas de cocina, e incluso celebran un Día del Salmorejo cada año. Un evento en el que locales y visitantes pueden disfrutar de esta delicia gratis en plazas y calles emblemáticas.
Si coincides con alguno de sus eventos, no lo dudes. ¡Suele haber degustaciones gratuitas!
¿En qué se diferencia el salmorejo del gazpacho?
Aunque a primera vista puedan parecer primos hermanos (ambos son fríos, tienen un tono rojizo y están hechos a base de tomate), lo cierto es que el salmorejo y el gazpacho son dos recetas muy distintas, tanto en textura como en ingredientes y en forma de servirlos.
1. Textura y consistencia
- El salmorejo cordobés es una crema espesa y untuosa, que se come con cuchara e incluso se puede usar como acompañamiento para otros platos (por ejemplo, con berenjenas fritas o tortilla de patatas).
- El gazpacho andaluz, en cambio, tiene una textura mucho más líquida, similar a la de una sopa fría. Se bebe directamente en vaso o se toma con cuchara, según la ocasión.
2. Ingredientes
- El salmorejo lleva únicamente: tomate, pan, ajo, aceite de oliva y sal. Nada más. Y se emulsiona con pan (a veces hasta un 20-30% del total del volumen), lo que le da su cuerpo denso.
- El gazpacho es más ligero y lleva más variedad de hortalizas: tomate, pepino, pimiento verde, ajo, pan (muy poco o nada), agua, vinagre, sal y aceite. Es una mezcla mucho más vegetal y refrescante.
3. Uso en la mesa
- El salmorejo se sirve como primer plato o entrante contundente, coronado con huevo duro y jamón serrano.
- El gazpacho se toma como refresco, aperitivo o primer plato muy ligero, especialmente en días de calor intenso.
4. Sabor
- El salmorejo tiene un sabor más suave y untuoso, gracias a la emulsión con aceite y pan.
- El gazpacho es más ácido y refrescante, gracias al vinagre y las verduras crudas.
Receta original del salmorejo cordobés
Pero ¿sabes qué es lo mejor del salmorejo cordobés?
Que es una receta súper sencilla para hacer en casa. Simplemente necesitas unos buenos ingredientes.
Así que, si eres de los que prefieren una buena receta casera, aquí te dejamos la receta auténtica del salmorejo cordobés. Sencilla, rápida y con ingredientes que seguro tienes en casa.
Ingredientes
- 1 kg de tomates maduros
- 200 g de pan del día anterior (preferiblemente de telera cordobesa)
- 1 diente de ajo
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
- Huevo duro y jamón serrano (para decorar)
Cómo se hace
- Lava bien los tomates y tritúralos hasta obtener una especie de puré.
- Cuela para eliminar las pieles y pepitas.
- Añade el pan troceado y deja que se empape durante unos minutos.
- Incorpora el diente de ajo y la sal.
- Tritura todo junto hasta obtener una crema homogénea y densa.
- Mientras sigues triturando, añade poco a poco el aceite de oliva para emulsionar.
- Sirve bien frío y decora con huevo duro picado y taquitos de jamón serrano.
El secreto está en la calidad del pan y el aceite. ¡Usa ingredientes de calidad y lo notarás en el sabor!
Receta del salmorejo blanco en Córdoba
Como cualquier receta tan popular, existen múltiples variantes del salmorejo cordobés. Una de ellas es el salmorejo blanco.
A diferencia del clásico, este plato no lleva tomate y tiene una textura algo diferente.
Ingredientes
- 250 g de almendras crudas peladas
- 150 g de miga de pan
- 1 diente de ajo
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra
- 1 chorrito de vinagre
- Agua fría y sal
Cómo se hace
- Tritura las almendras con el ajo y un poco de agua.
- Añade la miga de pan y deja que se hidrate.
- Añade el vinagre y la sal.
- Bate todo mientras incorporas el aceite poco a poco.
- Sirve bien frío, decorado con uvas peladas o trocitos de melón.
Este plato recuerda al ajoblanco, muy popular también en otras zonas de Andalucía, pero con su propio sello cordobés.
Dónde comer el mejor salmorejo cordobés
Vamos al grano: ¿dónde se puede comer el mejor salmorejo cordobés? Pues como todo plato tradicional, cada familia y cada taberna tiene su versión. Pero hay lugares que se han ganado su fama por méritos propios.
A continuación, te dejamos algunas paradas obligatorias para cualquier amante del buen comer.
Taberna el Salmorejo
Ubicada en pleno corazón de Córdoba, la Taberna El Salmorejo hace honor a su nombre con una de las versiones más fieles de la receta original.
Su textura es perfecta, el punto de ajo está equilibrado y el aceite es siempre virgen extra.
- Horario: de martes a domingo de 9:00 a 16:00.
- Precio: entre 10-20 € por persona.
- Ubicación: Calle Mayor de Sta. Marina, Centro, 14001 Córdoba.
Restaurante Sociedad de Plateros María Auxiliadora
Otro lugar emblemático donde probar salmorejo auténtico y otras delicias cordobesas. Fundada hace más de 70 años, esta taberna combina tradición con calidad.
- Horario: de lunes a sábado de 11:00 a 16:00 y de 20:30 a 00:00. Los domingos de 11:00 a 16:00.
- Precio: entre 10-20 € por persona.
- Ubicación: Calle María Auxiliadora, 25, Centro, 14002 Córdoba.
Está a unos minutos andando de la Calleja del Salmorejo, así que puedes hacer doblete cultural y gastronómico.
Taberna la Montillana
Otra joya del centro. Aquí sirven un salmorejo tradicional con matices muy equilibrados. Además, su carta incluye reinterpretaciones modernas de platos cordobeses.
- Horario: todos los días de 13:00 a 16:00 y de 19:30 a 23:30.
- Precio: entre 20-30 € por persona.
- Ubicación: Calle San Álvaro, 5, Centro, 14003 Córdoba.
Bodegas Campos
Si buscas un entorno elegante sin renunciar al sabor auténtico, este restaurante combina tradición y alta cocina cordobesa. Su salmorejo es de campeonato.
- Horario:todos los días de 13:00 a 16:00 y de 19:00 a 23:00.
- Precio: entre 20-30 € por persona.
- Ubicación: Calle Lineros, 32, Centro, 14002 Córdoba.
Restaurante Casa Pepe de la Judería
Un clásico del casco histórico, ideal para comer tras una visita a la Mezquita-Catedral. El salmorejo se sirve con jamón ibérico de bellota y huevo rallado, con textura suave y gran sabor.
- Horario: todos los días de 13:00 a 16:00 y de 20:00 a 23:30.
- Precio: entre 20-30 € por persona.
- Ubicación: Calle Romero, 1, Centro, 14003 Córdoba.
Bar Santos
Aunque este pequeño bar es famoso por su tortilla gigante, su salmorejo también merece un espacio en este post. Es una opción rápida, rica y económica frente a la misma Mezquita.
- Horario: todos los días 10:00 a 00:00.
- Precio: entre 10 – 20 € por persona.
- Ubicación: Calle Magistral González Francés, 3, Centro, 14003 Córdoba
Taberna Salinas
Otro local histórico que lleva sirviendo comida cordobesa desde el siglo XIX. Su salmorejo es 100% casero, con pan de telera y aceite virgen local.
- Horario: de lunes a viernes de 12:30 a 16:00 y de 20:00 a 23:30. Sábados de 12:30 a 16:00. Domingos cerrado.
- Precio: entre 20 – 30 € por persona.
- Ubicación: Calle Tundidores, 3, Centro, 14002 Córdoba
Mapa de dónde comer salmorejo en Córdoba
Para que puedas planificar mejor tu ruta gastronómica por la ciudad, hemos preparado un mapa donde encontrarás todos los restaurantes y tabernas recomendados en este post.
Así podrás saber exactamente dónde comer el mejor salmorejo cordobés. Si te fijas en el mapa, verás que algunos de los puntos señalados están cerca de lugares de interés.
Si eliges comer en Casa Pepe de la Judería o en Bar Santos, aprovecha para visitar la Mezquita-Catedral, el Puente Romano o el Arco del Triunfo, que están justo al lado.